La Regla de Oro

“Diga lo que se le ocurra”.

 Así funciona la regla psicoanalítica de la asociación libre. Sin consignas, sin preguntas a responder.  Sin un mínimo indicio para el hablante de qué es lo que espera  su interlocutor.

Y la cosa es que el sujeto, pudiendo decir cualquier cosa,  termina  dando vueltas siempre alrededor de  las mismas, por obra y gracia de la repetición.

Porque la asociación, de libre, tiene poco y  nada. La determinación inconsciente viene a quebrar  la ilusión del ejercicio de la libertad: de elegir el tema, las palabras,  lo que se dice, lo que se silencia.

Y haciendo una extrapolación de conceptos bien salvaje, algo parecido  pasa con este  blog.

A pesar de la ilusión de estar escribiendo  libre y  muy suelta de cuerpo  sobre  lo que se me ocurre, sin nada fijado de antemano, seguramente sólo será dar algunas vueltas más alrededor de mis intereses, mis inquietudes, de mis cosas, las de siempre.


Después no digan que no les avisé.

Algunas palabras que hemos dicho

regresan y se paran a nuestro lado

como si quisieran convencernos

de que llegaron a alguna otra parte.

Roberto Juarroz, Poesía Vertical [ VI - 20]

Ah! Y si algún tema les interesa, los comentarios son muy bienvenidos.

Como buena neurótica que soy,  siempre respondo.